CONTRUCCIÓN DE ALMACIGO
El almácigo sirve para proteger el crecimiento de las semillas pequeñas y delicadas, con buena tierra, calor, humedad y orientación. Se prepara con tierra, estiércol y arena de río conviene pasar estos elementos por una malla de alambre de 0.5 cms., antes de mezclarlos, por partes iguales
Una vez que se sembró el almácigo se tapan las semillas con un poco de tierra del mismo y se alisa con un pedazo de madera, se riega cada vez que necesite y se transplanta cuando la plantita tiene de 18 a 12 cms de alto.
Hay algunas hortalizas que no necesitan de almácigo y se pueden sembrar directamente en los surcos donde se desarrollan.
También se puede cultivar hortalizas en macetas y para esto cualquier recipiente es bueno. Las macetas tienen la ventaja de que se ubican en cualquier lugar, con
única condición de que reciban sol y aire.
La tierra para sembrar en macetas se prepara igual que para el almácigo, con tierra, estiércol y arena de río por partes iguales y se pasa por una malla de 0.5 cms. Y después se mezcla. Desinfectándose igual con agua hirviendo o formol.
ACLAREO
Cuando han brotado las plantas muy juntas, hay que arrancar las más pequeñas y dejar las más vigorosas para que reciban la luz y se den mejor.
DESHIEBRE
No deje crecer la maleza entre la hortaliza. Quite las hierbas para que las plantas absorban más y mejor los nutrientes.
PORQUE
Consiste en arrimar tierra a la planta para que enraíce bien. Hágalo con regularidad.
Consiste en arrimar tierra a la planta para que enraíce bien. Hágalo con regularidad.
CONTROL
En general hay tres formas de contrarrestar plagas y enfermedades.
Control biológico: Mediante insectos que se comen a los que se hospedan en las plantas.
Control casero: Aplicación de tés (infusiones) de tabaco, ajo, cebolla, mastuerzo, chile, cempasúchil, etc.
Control químico: Son los llamados insecticidas, fungicidas y pesticidas que se compran en el comercio.
TIEMPO DE COSECHAR.
La satisfacción de cultivar hortalizas se completa con una cocecha oportuna.
Es necesario aprender a distinguir cuando la planta ha madurado para aprovechar mayor sus hojas, frutos o raíces.
Todos los productos tienen un ciclo vegetativo que corresponde a los días transcurridos desde el momento de la siembra hasta la cocecha. En los calendarios técnicos que aparecen al final se inicia ese ciclo referido a cada variedad, para saber aproximadamente cuándo cocechar.
Sin embargo, hay otras características que también debe tomarse en cuenta: las hortalizas de hoja como el repollo y la lechuga, se cosechan cuando al tocarlas se siente duras y apretadas.
Las hortalizas de raíz o tubérculo, como rábanos, zanahorias y cebollas, se sacan manualmente, después de haber aflojado el suelo con una pala o bieldo.
Se sabe que la cebolla ha madurado cuando los tallos se han doblado.
Algunos horticultores acostumbran espiar las raíces escarbando un poco con el dedo para estimar su tamaño y maduración.
Las hortalizas de fruto como el pepino, jitomate, calabacita y otras se cosechan manualmente, desprendiéndoselas con cuidado. El pepino tiene mejor sabor cuando ha terminado de crecer y las semillas aún están tiernas.
El jitomate se cosecha cuando los frutos empiezan a rayarse.